Ubicada en pleno Parque Natural de Sierra Nevada y en el corazón de la Alpujarra, los orígenes de esta localidad como núcleo urbano se remontan al siglo XIII, cuando Soportújar era una alquería que pertenecía a la Taha de Órgiva.
Como toda la comarca tuvo especial protagonismo en la sublevación de Abén Humeya en el siglo XVI y pagó las consecuencias con la expulsión de los rebeldes moriscos y su consiguiente despoblamiento. Felipe II entregó el lugar a 27 familias procedentes de otras regiones y desde entonces ha conservado el carácter típico de la zona y se ha mantenido con un censo de población muy bajo.
Al entramado urbano del pueblo debe su nombre, ya que Soportújar significa “lugar de soportales”, en referencia a la abundancia de los típicos pasadizos callejeros conocidos como tinaos. La etimología de este municipio nos indica un poblamiento antiguo, ya que el termino Sopor= soportales es un vocablo latino, por lo que podemos pensar que el municipio ya estaba poblado en tiempos de los romanos. Soportújar (Lugar de Soportales)
Durante el periodo de poblamiento musulmán, hasta finales del S.XVI, Soportújar estuvo habitado por musulmanes que introdujeron el sistema de regadío.
Un hecho fundamental en la historia del municipio fue la Guerra de las Alpujarras (1568-1571) en el reinado de Felipe II. Vencidos los musulmanes, debieron abandonar el municipio, siendo sustituidos por cristianos procedentes de tierras cristianizadas; para que se establecieran, Felipe II les otorgaba la titularidad pública de casi todo el término municipal, es decir, en 1571 casi la totalidad del municipio no pertenecía a propietarios particulares, sino al común de los vecinos. En esa época Soportújar era una pequeña aldea, con el paso de los siglos fue ganando población, así el Catastro de Ensenoda, de mediados del S.XVIII, nos indica que el municipio tenía alrededor de 700 habitantes.
Decisiva también la Desamortización Civil de Madoz, realizada a partir de 1855, y en la que sacan a subasta las tierras que hasta entonces habían pertenecido al común de los vecinos, prácticamente el municipio se vendió en lotes al mejor postor. El S.XX y ante la presión demográfica, los soportujeros/as comienzan a emigrar a numerosos destinos. La guerra civil coge a Soportújar en la zona sublevada, apenas si habrá víctimas directas, pero si se dejarán notar y mucho las secuelas de las destrucción, pobreza y hambre que todo conflicto conlleva.
A partir de los años 50 comienza el éxodo masivo hacia Alemania,Francia,....Prueba de esta sangría demográfica, se percibe en los siguientes datos, en 1950 había 850 habitantes, en 1975 apenas superaban los 200.
A partir de los años 80 Soportújar mejora las condiciones de bienestar e incluso comienzan a retornar emigrantes y la población aunque envejecida se mantiene estable.